20/12/2012
Vengo reventado del viaje a Medina.Han sido dos días y medio muy intensos.
El viaje de vuelta no me permite ver a los monos babuinos que suelen acercarse a la carretera para que la gente les de comida.A pesar de ser Jueves, toca rematar temas previos a las vacaciones de Navidad.
Viene a verme a casa Rudwan.Primero para pagar por internet las facturas de la Villa de Medina, y segundo para enseñarme otra casa.Hay que ir pensando en aumentar el espacio ante la llegada del resto del equipo para primeros de año.
Rudwan me espera paciente, y mas tarde le explico que esto es muy español:En el último momento entran las ganas de hacer las cosas.
La villa que me enseña cerca de Corniche me parece una pasada, creo que es la casa mas "europea" de todas las que he visto.Tradicionalmente las casas aquí son enormes, y con una distribución muy parecida.Las plantas bajas suelen acoger la cocina,aseos y dos enormes salones.Uno es el de los hombres y el otro para las mujeres.La planta intermedia con las habitaciones y sus baños, suelen ser cuatro.La planta última es la dedicada a las habitaciones del servicio.Suele llamar la atención la decoración un tanto recargada, y un mobiliario bastante aparatoso.
La cena con aires de despedida por la marcha de algunos para casa, la realizamos en un restaurante Tailandés.Una vez mas confirmo la interesante oferta gastronómica de esta ciudad.
21/12/2012
Viernes,y seguimos trabajando.Esto demuestra que en el futuro nuestros días de descanso van a brillar por su ausencia.Imagino que será parte del reto, saber poner la línea divisoria entre trabajo y ocio.Ayudará el hecho de tener las oficinas en un lugar distinto a donde tenemos la vivienda.
Damos el do de pecho, yo ando con las baterías al límite.Y llegada la tarde hacemos una de las aproximaciones mas interesantes que nos quedan.
Nos acercamos al mercado de Al Balad, no es exactamente el Zoco que uno espera encontrar, se parece mas a un mercadillo de cualquiera de nuestras ciudades.Un lugar al que acudir a proveerte de ropa, té, incienso,..las clases menos favorecidas de la ciudad encuentran aquí a muy buenos precios lo que necesitan para su vida.Pero es muy interesante.No encontramos nada de artesanía tradicional ni similar, pero es una forma muy curiosa de tomar el pulso a esta parte de la ciudad y de sus habitantes,Paseamos entre ellos, y regateamos en las compras.Inevitable que se escapen las sonrisaas complices, llega un punto en el que si sigues apretando te lo llevas a un precio irrisorio.Es una gozada tocar la realidad de otro lugar, esa sensación de recorrer lugares poco transitados por los occidentales,ver lo que otros no suelen ver.Sigo coleccionando momentos únicos.
Por la noche quedo a cenar con Eugenio,mi Delegado en Teconsa.No nos veíamos desde hacía 3 años.Él por aquí de business, y echamos unas risas recordando viejas anécdotas, repasando las personas que conocemos y su situación actual.Damos con nuestros huesos en un restaurante persa,tras un breve encuentro con lo que en el futuro será el Paseo marítimo de la ciudad.Corre la brisa, esta es sin duda la mejor época para estar aquí.
22/12/2012
Rematando temas para la vuelta.Intentando que el toro nos pille lo menos posible.No veo llegar la hora de embarcar en el avión.Lo malo es que el día se va a hacer muy largo.Rafa y yo nos sentimos los últimos de Filipinas.Nos queda un paseo en busca de dulces para llevar a las familias, algún regalo de última hora, y apurar el tiempo de la manera mas amena posible.
Devolvemos los coches en la terminal Hajj, que está lejos de todo.Un empleado de la empresa de alquiler se ofrece a llevarnos dónde hay taxis.Efectivamente así es, pero su concepto se acerca mas a pescar un taxi que a cogerlo.Nos paramos en mitad de la autopista y salimos del coche poniendo nuestra integridad en juego"Así sale mas barato" nos dice el tipo con una gran sonrisa.Queda la duda de si es verdad o se está partiendo el culo de estos dos españolitos.
Luego viene convencer al taxista para que venga a buscarnos a la casa a la una y media de la mañana.Le preguntamos veinte veces si nos entiende.Parece que si.
Llegada la hora, descubrimos que no nos entendió una palabra.Toca apurarse, no es cuestión de perder el avión de vuelta a casa y el colchón de tiempo se va minorando.Arrastramos nuestras maletas echando humo a sus ruedas Sultan Road para arriba, y no vemos aparecer ni un taxi.Tarnquilidad.Si pero nos estamos poniendo blancos.Por fin, sobre la campana.Un taxi y para el aeropuerto.Cualquier cosa por banal que hagas en este país acaba convirtiéndose en una aventura.
Varios controles policiales despues, subimos al avión que nos lleva a casa por Navidad, como el turrón.Mas españoles a bordo, alguno conocido.Todos deseando pisar nuestra tierra y abrazar a nuestras familias.
Mar Salama.
A la vuelta mas.
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