CAMELLOS,HOSPITALES Y UN TE ÁRABE

19/12/2012

Medina no es Jeddah

Las comparaciones son odiosas, pero no me extraña que para los árabes Jeddah is different.Por lo poco que he podido ver la ciudad es bastante mas conservadora a todos los niveles.Por un lado, el tema de la zona Haram.Rodea la ciudad , está señalada con unos portones cada 500 metros aprox que te indican que eso está prohibido para no musulmanes.Esto incluye tres montañas enormes, que convierten a Medina en una ciudad fortificada por accidentes naturales.La vida en la calle tambien se nota distinta.Hoy nos han invitado a irnos de un restaurante de comida rápida,ya que se acercaba la hora del rezo, y una comida que en Jeddah podríamos haber hecho en el restaurante, con las puertas cerradas, aquí se convierte en un take away inesperado.Seguiré avanzando en el conocimiento de la ciudad, a pesar de sus límites.

Buscando hospitales

La sanidad saudí tiene fama de ser muy buena.No existe la pública como tal.Aquí se cobra por la atención.Lo que hacen las empresas y los trabajadores son unas aportaciones a una especie de mutua que gestiona el estado, el GOSI, y que sirve para cubrir bajas de accidente y enfermedad, así como un extraño sistema de pensiones.

Los hospitales suelen contar con muchos medios y con médicos que han estudiado en EEUU.Pero claro, la cosa en las zonsa rurales puede cambiar.Tengo que averiguar si en caso de un accidente en los trabajos que se están realizando ahora, podemos evacuar a una persona a algún hospital cercano.
Cercano en esta zona de Arabia, es muy relativo, aquí pueden pasar 40 kilómetros sin ver mas que camellos y beduinos pastoreandolos.
De noche( seis y poco de la tarde) hacemos una incursión en busca de uno de esos hospitales.Supuestamente es el mas cercano a la zona de trabajos.Conduce Mohamed, mi seguro de supervivencia desde mi aventura de ayer.No pienso separarme de él cada vez que tenga que hacer incursiones al interior.Vamos por una carretera oscura,No,lo siguiente.No vemos el momento de ver aparecer luces a la vuelta de esa curva.O de esa.
Por fin llegamos a Wadi Al fará, un pueblo no muy grande, pero que cuenta con un Hospital con servicio de urgencias y Ambulancias.Dentro Moha hace de interpreté y logramos enterarnos de que todo está tarifado,y que nos atenderían sin problemas.

Un te al estilo beduino

De vuelta paramos en un puesto de la Media Luna roja, no está tampoco demasiado lejos de la zona de trabajos.
Cuando llegamos nos encontramos a un grupo de personas sentados en el suelo, encima de mantas, tomando té y café árabe con pastas.
Nos invitan a sentarnos.
Son los sanitarios, el Jefe de puesto, y dos personas mas de cierta edad.Empezamos preguntando por el servicio de ambulancias, y acabamos degustando té con ellos,hablando del Madrid y del Barsa, de ciudades árabes en Ispaniya, de por que los catalanes se quieren ir de España(¿Es por religíón?, me pregunta uno de ellos).
Es como se hacen las cosas por aquí.Despacio, charlando,sin prisas,saltando de un tema importante a otro que parece no serlo, pero que le sirve a tu interlocutor para hacerse una idea de ti.Gente muy astuta estos árabes.
Y el tiempo pasa, y nos invitan a cenar y a seguir charlando."¿Otro té?"la,la...rechazamos amablemente la invitación.Apretones de manos,buenos deseos, que Alá nos acompañe y nos vamos.Bastante cansados.pero, una vez mas, sorprendido de la forma tan ancestral de enender la vida, el paso del tiempo, la relación con los demás.
La hospitalidad como rango distintivo del habitante del desierto.Que no está muy acostumbrado a recibir visitas y agradece un poco de conversación, de conocimiento y ,por qué no, de dejar pasar el tiempo despreocupadamente.

Mar Salama