14/04/2013
Vuelvo de España y me encuentro una gran sorpresa.Me mudo al Crystal.Ultimamente pasaba mucho tiempo por sus obvias razones:gimnasio,piscina,playa,buen ambiente,...
La buena noticia es consecuencia de una mala.Ese incesante equilibrio que mantiene el mundo que me rodea siempre en marcha.Rafa se ha marchado del proyecto, a empezar una nueva aventura profesional(Suerte amigo¡¡¡).Le voy a echar de menos,hemos vivido grandes momentos juntos.
Así es que he pasado unos días colocando las maletas, que fueron preparadas de forma apresurada.La vida en Jeddah está tal como la dejé.Solo es reseñable el hecho de que haya unas temperaturas máximas mas que aceptables para estas alturas del año.Esto permite estar haciendo tareas sin que tengas que arrepentirte por moverte en exceso con tareas tan ingratas.
De España no he podido traerme el visado renovado ,tal y como era mi intención,por lo que en Mayo me espera un viaje relámpago a casa.Coincidirá con mi salida mensual,de esa forma cambio destino exótico por abrazos familiares.Nada que objetar.Por supuesto.
Intento recuperar la forma perdida en España, sobre todo la segunda semana.Reconozco haber cedido ante tentaciones varias como el jamón, el pan, la cerveza,...No me conozco.Yo llegue a Saudí sin haber probado gota de alcohol en años.Me justifico ante mi y los demás diciendo que era mi elección, y que ahora me obligan , y por ello, me rebelo y cuando vuelvo a casa, peco.Ummm,no se si cuela.
Parte del reto de recuperar la forma es salir a correr con los expertos maratonianos que andan por mi nueva casa.David y Alberto.Tanto monta,monta tanto.Vaya dos.Van a acabar conmigo.Pero "No pain No gain".Lo del "pain" es verídico:me han sangrado los pezones.Madre mía que manera de sudar.30º nocturnos tienen parte de culpa.Corremos por una carretera de road movie de serie Z.Mal iluminada, polvorienta, fijandonos la meta lejana de un Burguer King.Quizá último vestigio de civilización en varios kilómetros.
Llegar hasta allí no supone ninguna liberación,luego queda la vuelta hasta la casa, y el sudor empieza a nublar la vista.Es eso o el que ya no te circula la sangre al cerebro.Siempre he suscrito la frase de mi suegro:"correr es de cobardes", ahora prefiero cambiar cobardes por locos.
No cuento nada de España para no ponerme muy triste.primero por lo bien que lo pasé entre las frías montañas, que cantan los enanos del Hobbit, con mi familia.Y segundo por haber visto la tristeza en la cara de la gente en los autobuses y metro.No me gusta esa pérdida de felicidad.Nuestro rasgo mas característico.Se acabaron las ganas de chiste fácil.No esta el horno para bollos.Entiendo el cabreo, lo comparto, y al mismo tiempo, lo veo como un espectador.Mis problemas laborales se circunscriben al día a día de mi oficina, situada a 4.500 km.Lo siento de verás por tener allí a mi familia y amigos.Entiendo que no es el mejor ambiente en el que poder vivir.
El viernes tenemos preparada una excursión a un lugar curioso.Barcos mercantes encallados nos esperan.
Mar Salama....
Así que ahora te juntas con maratonianos eh?
ResponderEliminarEspero que hables con propiedad ya que un maratoniano es aquel que por lo menos una vez ha vencido a Filípedes, no el que se pone las zapatillas un corre un ratito. Yo sin ir más lejos no tengo mal nivel pero no soy maratoniano.
Espero que las pilas estén bien recargadas hasta mayo, del ambiente de aquí mejor no hablar.
Cuídate y un abrazo.
Jelouuuuu friend,
EliminarQue si que son maratonianos, uno de ellos estuvo en la de Roma hace unas semanas.Pero estoy a años luz de eso.De momento me conformo con aguantarles el ritmo unos kilometros.
Un abrazo